Columna de opinión por Cristian Pérez Marín, director Centro de Armonización Curricular y Desarrollo Docente (CACyDD) UDA, Magíster en Educación.
En la era digital, las Tecnologías de la Comunicación y la Información (TIC) están transformando la educación superior, ofreciendo herramientas innovadoras que mejoran la calidad del aprendizaje. La gamificación, que incorpora elementos de juego en contextos educativos, es una metodología clave que incrementa la motivación y el compromiso de los estudiantes. Aplicaciones como Kahoot! EDU permiten transformar evaluaciones tradicionales en competencias lúdicas, fomentando la participación activa y mejorando la retención de conocimientos, donde los estudiantes responden preguntas en tiempo real desde sus dispositivos, compiten por puntos y pueden ver su progreso en una tabla de clasificación.
La gamificación no solo hace que el aprendizaje sea más interactivo, sino que también promueve la colaboración y el trabajo en equipo, fortaleciendo habilidades sociales esenciales en el entorno profesional actual. Está el caso de docentes que utilizan estas herramientas para organizar actividades grupales, donde los estudiantes deben discutir y consensuar respuestas, lo que fortalece habilidades sociales y de comunicación. Además, estas herramientas permiten la personalización del aprendizaje, facilitando a los docentes adaptar actividades a las necesidades individuales de los estudiantes y recibir retroalimentación inmediata para ajustar la enseñanza.
En la Universidad de Atacama además de declarar que las TIC y la gamificación son fundamentales para mejorar los aprendizajes en la educación superior, avanzamos en la implementación institucional de la gamificación docente, incorporando elementos lúdicos en el proceso educativo. Así, con la experiencia que hemos alcanzado en las asignaturas adheridas a través del apoyo brindado por el Centro de Armonización Curricular y Desarrollo Docente (CACyDD), logramos aumentar la motivación y el compromiso de los estudiantes, sin dejar de fomentar la colaboración, personalizando la experiencia de aprendizaje.