Con alegría, juegos y mucha curiosidad, estudiantes de primero y segundo año de la carrera de Medicina de la Universidad de Atacama realizaron una intervención educativa en el jardín infantil y sala cuna Rayún Montessori de Copiapó, con el propósito de acercar a niños y niñas al entorno de la salud a través de experiencias lúdicas y adaptadas a su edad.
La iniciativa, organizada por la Facultad de Medicina en colaboración con la Federación Internacional de Asociaciones de Estudiantes de Medicina (IFMSA), fue coordinada por el académico Rodrigo Gamonales, quien destacó el trabajo en equipo y la planificación detrás de la jornada. “El principal desafío fue adecuar el entorno y las dinámicas a las características de los lactantes, cuidando los tiempos, materiales y lenguaje para asegurar una experiencia positiva, tranquila y significativa”, explicó.
La estudiante Fernanda Vásquez, de segundo año de Medicina y parte del equipo organizador, señaló que el propósito fue promover una relación positiva entre la infancia y la salud. “Buscamos que los niños y niñas se familiaricen con el entorno sanitario, disminuyendo temores asociados a la atención médica y fortaleciendo hábitos de autocuidado e higiene desde los primeros años”, comentó.
Durante la intervención, los pequeños participaron en dinámicas interactivas, exploraron materiales médicos adaptados y jugaron en un “hospital de los ositos”, donde pudieron aprender de manera cercana y afectiva sobre la labor del personal médico.
Para Martín Estudilla, también estudiante de segundo año, el enfoque comunicacional fue clave para lograr una conexión genuina. “Utilizamos un lenguaje simple, gestos y demostraciones visuales para captar su atención. Mantener un tono afectuoso y la paciencia fueron fundamentales para generar confianza y permitir que disfrutaran la experiencia”, destacó.
Desde el jardín infantil, la jornada fue valorada como una oportunidad significativa de aprendizaje. Silvana Ravenna, sostenedora del jardín Rayún Montessori, expresó que “los niños se acercaron al mundo de la salud de forma afectiva y sin temores. Este tipo de actividades fortalecen los lazos con instituciones locales y promueven una relación más amable y cercana con los profesionales de la salud”.
En tanto, la directora del establecimiento, Marcela Castillo, resaltó el impacto pedagógico de la iniciativa. “A través de la exploración, los niños desarrollan curiosidad y aprenden a ver la atención médica como algo natural. Este tipo de experiencias amplía sus recursos personales, fomenta la empatía y les permite reconocer el valor del cuidado”, afirmó.
El académico Rodrigo Gamonales subrayó además la importancia formativa que este tipo de actividades tiene para los futuros profesionales. “Seleccionamos a estudiantes con empatía, compromiso y vocación, porque la alfabetización en salud no solo se enseña, se vive. Formar médicos y médicas con sensibilidad social también es parte de nuestra misión”, enfatizó.
Desde la Facultad de Medicina de la Universidad de Atacama se proyecta continuar desarrollando intervenciones educativas en distintos espacios de la comunidad, reforzando el compromiso institucional con la promoción de la salud, la vinculación con el medio y la formación integral de profesionales con enfoque humano y social.







