Al interior de nuestra casa de estudios se llevó a cabo el Seminario «Percepción de Riesgo de las y los Habitantes de Tierra Amarilla», evento en el cual se presentaron los resultados de un estudio enfocado en evaluar las sensaciones que tienen los habitantes de esta comuna respecto a eventos como el socavón del 2022.
Durante el seminario, el equipo investigador, conformado por Sara Arenas y Rodrigo Landabur del Departamento de Psicología, en colaboración con Héctor Barroeta de la Universidad de Valparaíso, y gracias a la iniciativa Minvu-Universidades, presentó los resultados obtenidos durante el estudio realizado durante el 2023.
“Entre los resultados más relevantes, se encontró que las mujeres y las personas de mayor edad percibían el evento del socavón como más severo. Asimismo, se identificaron las razones que llevaban a las personas a permanecer o abandonar Tierra Amarilla. El tejido social es un mediador del vínculo de las personas frente al cambio en el territorio”, explicó Sara Arenas.
Percepciones
Con la presencia de más de 70 personas, entre ellas autoridades comunales, estudiantes, y residentes de la comuna minera, se discutieron los resultados y se reflexionó en torno a la temática expuesta en dos paneles.
Tras entrevistar a 260 residentes y colaborar con 40 personas adicionales en grupos de trabajo durante el año pasado, se evidenció que la comunidad consideraba a Tierra Amarilla como un territorio con problemas ambientales, atribuyendo su origen al rol de las mineras en la zona, la falta de fiscalización de las autoridades y la escasa participación y articulación entre la comunidad y las instituciones.
Iván Hidalgo, presidente de la Junta de Vecinos de Gabriela Mistral en Tierra Amarilla, se refirió a este informe y mencionó “Me parece sumamente interesante y necesario que tanto las autoridades como la universidad centren su atención en este tema para que la comunidad pueda estar plenamente informada. Tierra Amarilla debe tomar conciencia y preocuparse más por esta situación, ya que no se trata de un problema menor. Este evento sin precedentes no solo afecta a nuestra comunidad, sino que también nos expone a futuros riesgos, como la posibilidad de nuevos socavones”
“Los resultados de estos estudios son fundamentales para llenar ese vacío de información y brindar un mayor entendimiento de la situación. Personalmente, considero que este estudio es un primer paso importante, pero necesitamos más recursos y esfuerzos para abordar completamente esta problemática y comprender su verdadera magnitud”, puntualizó el tierra amarillano.
La contaminación, la posibilidad de nuevos socavones y las tronaduras fueron los factores determinantes en cuanto a las razones para no residir en Tierra Amarilla. Sin embargo, las oportunidades laborales, la cercanía entre vecinos y el cariño por la comuna, fueron las razones que justifican la permanencia en el lugar.
Sobre este estudio, el rector de la casa de estudios, Forlin Aguilera Olivares, resaltó «Es de gran valor ver cómo la investigación y el trabajo universitario se enfocan en servir a las necesidades de nuestro entorno. La vinculación con el medio nos permite divulgar resultados de investigación y colaborar estrechamente con diversos sectores. Este estudio demuestra nuestro compromiso con el desarrollo de nuestra región. Como Universidad, asumimos la responsabilidad de que nuestras acciones y procesos formativos estén alineados con las necesidades de nuestro territorio”.
En este sentido, la seremi de Vivienda y Urbanismo, Rocio Díaz, expresó “estamos muy agradecidos, de que la Universidad haya aceptado esta alianza denominada Minvu-Universidades del Centro de Estudios de Ciudad y Territorio del Ministerio de Vivienda y Urbanismo. En esta oportunidad, el trabajo de investigación desarrollado en el territorio, nos ha permitido conocer desde la dimensión social, cuál es la percepción del riesgo post subsidencia, sus consecuencias y afectaciones en la salud mental de las personas. Y en un segundo panel, pudimos ver la presentación de dos académicos invitados al Seminario, respecto a la Gestión del Riesgo, desde el punto de vista de cómo involucramos a la comunidad en la solución, como también, cómo analizamos y evaluamos desde la política pública, en torno a las futuras decisiones”.
Una mirada desde fuera
Lais Pinto, psicóloga ambiental de la Universidad Metropolitana junto a Marcelo Lagos, Geógrafo de la Pontificia Universidad Católica de Chile, fueron quienes lideraron el panel dos titulado “El riesgo y la gestión”.
Sobre este espacio, Lagos, expuso que “Me siento muy feliz por la oportunidad de compartir los resultados de estudios que buscan empoderar y democratizar el acceso a la información sobre situaciones que afectan la calidad de vida en nuestros territorios. Este espacio nos permite trabajar junto a la comunidad, cumpliendo con nuestro compromiso vital como universidad de contribuir al bienestar de las personas en su entorno”.
Sobre este estudio, el también director alterno del Centro de Investigación en Vulnerabilidades e Informalidades Territoriales de la UV, Héctor Berroeta, resaltó el valor de la investigación académica y su impacto en la comunidad, “Nuestras investigaciones tienen dos enfoques clave. Uno académico, centrado en generar conocimiento y compartirlo globalmente, y otro práctico, orientado a impactar positivamente en las comunidades. Ahora, estamos en el proceso de pasar de la investigación a la acción, utilizando nuestra información para empoderar a las comunidades y promover el cambio social, concluyó el investigador.